Desde el
momento en que nacemos, el reloj comienza a correr. Cuando somos jóvenes, no
somos tan conscientes de ello. Sin embargo, llega un momento en la vida de
todos cuando nos sentamos y nos preguntamos: "¿A dónde se fue el
tiempo?" A medida que envejecemos, nuestro organismo cambia, al igual que
nuestra percepción del tiempo. Esto nos hace sentir que el tiempo pasa más
rápido.
No importa
cómo te lo gastas, lo hagas girar, la vida se mueve tan rápido. Si no lo
vivimos plenamente, nos perderemos muchos momentos hermosos.
En palabras
de Roberto Orben, “El tiempo vuela. Depende de ti ser el navegante”.
Es por eso
por lo que creo en el valor de reducir la velocidad. Esto suena un poco
contradictorio, ¿no? Si el tiempo se acaba, ¿no deberíamos movernos y darnos
prisa? Pues creo como
su autor Orben “Cuanto
más rápido vamos, más nos perdemos”.
En su libro
El Guardian del Tiempo (The Timekeeper), del autor Mitch Album
resume maravillosamente la paradoja del tiempo:
“Intenta
imaginar una vida sin cronometraje. Probablemente no puedas. Sabes el mes, el
año, el día de la semana. Hay un reloj en su pared o en el tablero de su
automóvil... sin embargo, a su alrededor, se ignora el cronometraje. Los
pájaros no llegan tarde. Un perro no mira su reloj. Los ciervos no se preocupan
por los cumpleaños que pasa. Sólo el hombre mide el tiempo. Sólo el hombre da
la hora y, por eso, sólo el hombre o mujer sufre un miedo paralizante que
ninguna otra criatura soporta. Miedo a que se acabe el tiempo”.
Solo tienes
una vida, así que haz que tu tiempo aquí en el planeta cuente. No lo
desperdicies en nada que no sirva a tu ser superior. En su lugar, dedícales
tiempo a las cosas que te hagan mejor persona construyendo poco a poco una
historia interesante, virtuoso, emocionante y sobre todo cautivador, para que
cualquiera quiera leer.
Y como
diría la canción My Hero de Foo Fighters : “Felicitaciones,
mi héroe, Dejando todo el lío, conoces a mi héroe El o Ella que está encendid@,
Ahí va mi héroe”.
P.D Dedicado a Lupita Woc Samayoa,
Roberto Muñoz y a esas personas que sufren duelo, esto toma tiempo para tratar
de superar y el duelo, duele, lastima un montón. Pero tiene que pasar y cuando
algún día sanes, más fuerte tenemos que estar, vas a volver a brillar, más alto
vamos a volar, más libre vamos a soñar y entenderemos algún día que estas
historias terminaran, que algunas nos harán recordar para que en nuestra nueva
vida otras mejores podamos iniciar.
