En el largo plazo estaremos muertos…

El problema de inseguridad para nuestro país ha sido un tema triste y muy preocupante para todos.

La desintegración social y económica, , la crisis en todos los sectores de la sociedad, la ausencia de estímulos y oportunidades, los actos de corrupción, ladrones sueltos en cada ciudad, son situaciones que de una forma u otra han contribuido a incrementar este terrible problema, “la inseguridad”.

¿Qué se necesita para sacudir al pueblo? Porque mientras permanezcamos indolentes ante la crisis , generada por el gobierno de Sandra Colom, este continuara abusando del poder y enriqueciéndose a costillas de ese mismo pueblo que se llama Guatemala.

Ahora bien, el problema de la inseguridad cada vez agudiza, ya solo estamos esperando ser testigos o víctimas de cualquier delincuente para robarnos un batería como lo que ocurrió recientemente en la zona 1 de Xela , o asaltos a camionetas extraurbanas, escuelas y también se ha extendido hacia residenciales que se ven afectados por esta terrible problemática.

Pero es preocupante cuando las organizaciones de la sociedad civil maestros, campesinos, intelectuales, indígenas, mujeres, estudiantes y trabajadores en general decidirán acciones en contra del poder político? El problema de desgobierno, la corrupción, el abuso del poder y la inseguridad incontrolable entre otras cosas, nadie está dispuesto afrontarlo ni el mismo gobierno quien se encarga para resolverlo ahora pues como dice un refrán: “En el largo plazo estaremos muertos”.

Mientras que el pueblo se truena los dedos para sobrevivir, cada vez es más expoliado por nuevas cargas impositivas, no solo generadas por el gobierno sino también por municipalidades.

Estos graves problemas hay que sumarle la inseguridad ciudadana que estamos atravesando todos, la falta de inversión en infraestructura, educación y salud.

Hace falta que esta participación sea efectiva, no basta solo con declaraciones de buenas intenciones como escuchamos ahora los políticos decirnos. Ciertamente, la inseguridad nos aflige a todos por igual, ¡Que Dios nos acompañe a enfrentar esta tarea con todas nuestras fuerzas y con todas las herramientas que tengamos a la mano!