Mi línea de opinión es liberal y abierta, comprometida con expresar ideas con honradez y convicción. He colaborado en espacios como Revista Crónica, El Quetzalteco, Siglo XXI y La Voz de Xela. Actualmente escribo de forma independiente, con total libertad, lejos de tartamudos mentales o aduladores de turno. Me dirijo a quienes realmente valoran la lectura honesta, directa y sin filtros.
viernes, 20 de septiembre de 2013
Amor de mi vida…
Si pudiera viajar en
el tiempo quisiera volverte a encontrar en el mismo lugar pero quisiera dejar
todo por ti, esta mañana descubrí que vuelvo a sentir que aun te necesito, en
nuestro caso personal no sé qué voy hacer. Si es verdad, que parte no entiendes
que estoy seducido por tus ojos, tu sonrisa que quiero verte al despertar por
el resto de mi vida. Me enseñaste cosas tan bellas, me demostraste que soñar no
es una pérdida de tiempo, me indicaste apreciar las cosas simples que nunca
tomaría en cuenta que el olvido no es perdón me mostraste el mundo con otros
ojos, me ayudaste, y demostraste que la humildad son las llaves maestras para
abrir todas la puertas del mundo. Donde hay soberbia, allí habrá ignorancia mas
donde hay humildad habrá sabiduría. Corazón de melón abrazarte es amor y
transportarse al cielo solo por un instante. Allá donde estas sobras aquí donde
estoy faltas. Siempre tratare de sacarte una sonrisa, aunque estés triste o de
mal humor y yo ande igual que tú. Lo que más quiero en este mundo eso eres. El amor es esa pistola con la que todos nos
suicidamos alguna vez. Me dices que soy: “sexy leyendo un buen libro que unos
que van por ahí, arruinando historias y metiendo puro cuentos”. Ahora yo te
cuento que me sobraron ganas y te falto valor. Te doy lo que quieras, pero
juntos. Siento que hay algo que se murió en mi vida, por si quieres que te
olvide pintare un pino en la pared, si ese pino crece entonces yo te olvidare.
Necesito más amor que cualquiera, no de cualquiera. Soy aquel que por quererte
ya no vive. El que te espera, el que te sueña, el que quisiera ser dueño de tu
amor. Un día alguien entrara en tu vida y podrás entender por qué no funciono
con nadie más. Como dijo alguna vez Mario Benedetti “Que alguien te haga sentir cosas sin ponerte un dedo
encima, eso es admirable”. Creo que
estoy loco, es verdad, pero por ti. Hoy
te veré, correré hacia ti te abrazare con mi sonrisa y te diré
al oído “te echaba de menos”. Quiero en tus manos abiertas buscar mi camino. Ahora
hay que olvidar como si aquello consistiera únicamente en dejar de recordar, yo
aún te amo aunque no lo sepas
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